Nada más llegar a Corea me sorprendió entre otras cosas, por la nueva tecnología de la que disfrutan los coreanos. Utilizan móviles que en España todavía son impensables. Los utilizan para todo: por supuesto para llamar y mandar mensajes pero también para ver la televisión, ver series, escuchar música e incluso para mirarse en la pantalla a modo de espejo. Tienen un gran negocio montado en torno a los móviles, pero de eso hablaré en otro momento.
Todos tienen un telefóno móvil como mínimo, aunque he visto que hay gente que lleva más y suelen utilizarlo constantemente: en el metro, en la calle, caminando, etc.. parecen haber desarrollado una habilidad que diría innata, para caminar y ver una serie en su móvil. Además suelen tener otros aparatos electrónicos que he visto incluso, utilizarlos simultáneamente: mientras escribe un mensaje con su teléfono móvil, disfruta de su serie favorita en una mini televisión portátil.
Luego están los demás aparatos tecnológicos como consolas: sobretodo he visto psp y nintendo ds, y otros aparatos portátiles para ver la televisión, etc. Los utilizan todos y todas, tengan la edad que tengan, ya que cada uno ha sabido encontrar el que mejor se adapta a sus circunstancias. No es raro ver como en el metro los niños de corta edad, unos 3 - 4 años, se pasan el viaje jugando a algun videojuego o reclaman a los padres que le dejen su teléfono móvil para jugar.
Todo esto me hizo pensar en las adicciones a las nueves tecnologías como las que se tratan hoy en día en España. Estas serían la adicción a Internet, al juego y al uso de servicios y objetos como puede ser el teléfono móvil, televisión, etc.
Las claves fundamentales para entender una conducta adictiva son (1) que produce una dependencia a esa sustancia (tabaco, alcohol) u objeto/servicio (internet, móvil, etc.) (2) y que está asociada a una falta de control sobre esa conducta. Las personas que la padecen suelen negar el problema y si se les retira esa sustacia u objetivo, suelen presentar cambios de humor repentinos entre los que pueden presentar ira y agresividad.
No se puede hablar de trastorno psicológico, sea del tipo que sea, si no se dan los siguientes requisitos:
1. La presencia del trastorno supone una desviación de las normas culturales y sociales establecidas. Es decir, es una manifestación individual de una disfunción comportamental, psicológica o biológica.
2. Implica la presencia de emociones dolorosas del tipo ansiedad, depresión, ira, etc. de forma continuada en el tiempo y que normalmente son de larga duración (algunas especifican que tenga una duración mínima de 6 meses o incluso 1 año).
3. Además provoca conflictos duraderos en las relaciones interpersonales del tipo social, familiar, de pareja, etc, como puede ser pérdida de amistadas, enfrentamientos con los padres, etc.
En referencia al primero de ellos, se puede decir que la conducta de utilización de los teléfonos móviles en Corea no es abusiva ni desviada respecto de la norma ya que está totalmente aceptada en este pais. Quizá aquí las normas culturales acepten este tipo de comportamientos y por esta razón la utilización de las nuevas tecnologías no estén sujetas a este tipo de consideraciones patológicas. Por eso, aquí no se puede hablar de adicción a las nuevas tecnologías si no se dan las premisas anteriores, al menos no como nosotros la entendemos. Además, si estrapoláramos la cantidad y calidad de uso de estas tecnologías de Corea a nuestro país, tampoco podríamos hablar de adicción en España ya que la cantidad y calidad de esta conducta es mucho menor que la que se da en Corea.
Por eso, y como dice una famosa cita: "Todo depende del cristal con que se mire"
Todos tienen un telefóno móvil como mínimo, aunque he visto que hay gente que lleva más y suelen utilizarlo constantemente: en el metro, en la calle, caminando, etc.. parecen haber desarrollado una habilidad que diría innata, para caminar y ver una serie en su móvil. Además suelen tener otros aparatos electrónicos que he visto incluso, utilizarlos simultáneamente: mientras escribe un mensaje con su teléfono móvil, disfruta de su serie favorita en una mini televisión portátil.
Luego están los demás aparatos tecnológicos como consolas: sobretodo he visto psp y nintendo ds, y otros aparatos portátiles para ver la televisión, etc. Los utilizan todos y todas, tengan la edad que tengan, ya que cada uno ha sabido encontrar el que mejor se adapta a sus circunstancias. No es raro ver como en el metro los niños de corta edad, unos 3 - 4 años, se pasan el viaje jugando a algun videojuego o reclaman a los padres que le dejen su teléfono móvil para jugar.
Todo esto me hizo pensar en las adicciones a las nueves tecnologías como las que se tratan hoy en día en España. Estas serían la adicción a Internet, al juego y al uso de servicios y objetos como puede ser el teléfono móvil, televisión, etc.
Las claves fundamentales para entender una conducta adictiva son (1) que produce una dependencia a esa sustancia (tabaco, alcohol) u objeto/servicio (internet, móvil, etc.) (2) y que está asociada a una falta de control sobre esa conducta. Las personas que la padecen suelen negar el problema y si se les retira esa sustacia u objetivo, suelen presentar cambios de humor repentinos entre los que pueden presentar ira y agresividad.
No se puede hablar de trastorno psicológico, sea del tipo que sea, si no se dan los siguientes requisitos:
1. La presencia del trastorno supone una desviación de las normas culturales y sociales establecidas. Es decir, es una manifestación individual de una disfunción comportamental, psicológica o biológica.
2. Implica la presencia de emociones dolorosas del tipo ansiedad, depresión, ira, etc. de forma continuada en el tiempo y que normalmente son de larga duración (algunas especifican que tenga una duración mínima de 6 meses o incluso 1 año).
3. Además provoca conflictos duraderos en las relaciones interpersonales del tipo social, familiar, de pareja, etc, como puede ser pérdida de amistadas, enfrentamientos con los padres, etc.
En referencia al primero de ellos, se puede decir que la conducta de utilización de los teléfonos móviles en Corea no es abusiva ni desviada respecto de la norma ya que está totalmente aceptada en este pais. Quizá aquí las normas culturales acepten este tipo de comportamientos y por esta razón la utilización de las nuevas tecnologías no estén sujetas a este tipo de consideraciones patológicas. Por eso, aquí no se puede hablar de adicción a las nuevas tecnologías si no se dan las premisas anteriores, al menos no como nosotros la entendemos. Además, si estrapoláramos la cantidad y calidad de uso de estas tecnologías de Corea a nuestro país, tampoco podríamos hablar de adicción en España ya que la cantidad y calidad de esta conducta es mucho menor que la que se da en Corea.
Por eso, y como dice una famosa cita: "Todo depende del cristal con que se mire"
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